Número 1.
Un bloguero, en gran porcentaje, es un tipo que tiene la pretensión de que aquello que escribe, le importa una mierda a alguien.
Número 2.
La mayor parte de los blogueros publican en su blog y no en Facebook, porque les falta el coraje (eufemismo de huevos) para hacerlo, ya que allí tendrían que soportar mil y una barbaridades.
Número 3.
Un bloguero, además de la pretensión citada antes, tiene otra: Que su entrada sea leída en su totalidad y hasta el final, lo cual suele pasar en contadas ocasiones.
Número 4.
Un bloguero como los dioses mandarían, si existieran, jamás, y subrayo jamás debe esperar que se entienda su ironía, sarcasmo y buen humor. Si lo hace acabará con contracturas cervicales.
E xa que esta entrada foi escrita un martes,
pois que de moita merda te fartes
(Pardo, sin Bazán)
Conxu! Jo publico a twitter que encara és pitjor. Però no em fan gaire cas.
😂
Hay gente a la que parece gustarle.
De momento cuando cuelgo lo del blog en Facebook no me insultan.
Doy por hecho que me leen e incluso al completo, tampoco me enrollo tanto. ;)
En cuanto a la ironía, si no la entienden es su problema, no voy a cambiar de estilo.
Unas excelentes reflexiones (aforísticas) Podrían hacerse más y con tamaño ingenio. Siga usted, que lo retrata (nos retrata) molt bé.
Nota al Sr. Pardo: que conste que Pardo Bazán (Doña Emilia) fue una literata de categoría internacional. No tiene el culto de otros literatos europeos menos interesantes, al fin y al cabo era mujer, gallega y española y eso se paga en la trayectoria. Creo que el problema de no ser conocidos y apreciados lo suficiente muchos literatos españoles radica en el propio país.