Por el interés que me suscita el tema, traigo hoy al blog este artículo, que reproduzco (licencia Creative Commons con Reconocimiento- No Comercial y Sin obra derivada 4.0) publicado en la Revista "Cuaderno de Cultura Científica". Como es preceptivo, está reproducido sin añadir ni quitar nada, tal y como exige la licencia. Me gusta colaborar con estas difusiones culturales, siempre que la licencia me lo permita.
⛛
¿Existe algo después de la muerte? Aunque multitud de religiones intenten dar su propia respuesta a esta angustiosa pregunta a lo largo de la historia de la humanidad, lo cierto es que no existe ninguna prueba de que alguien que haya sufrido una muerte cerebral (irreversible) haya podido volver al mundo de los vivos para contarlo.

Una situación, muy diferente, es el proceso de transición a la muerte. Algunas personas sí son capaces de sobrevivir a este periodo difuso, al filo de la expiración, e informan de tener las conocidas como experiencias cercanas a la muerte (ECM). Se estima que un 10 % de los individuos que sobreviven a una reanimación cardiopulmonar (RCP) tras un paro cardíaco describen ECM durante el periodo de reanimación cuando estaban supuestamente inconscientes y al borde de la muerte. Algunos incluso describen que pudieron ver y oír detalles durante la parada cardíaca (en la que no hay bombeo de sangre ni tampoco respiración).
Las descripciones de los pacientes sobre estas experiencias, intensas y surrealistas, suelen tener varios puntos en común. Muchos describen haber contemplado una panorámica de la historia de su vida o los fragmentos más importantes de ella. Otros experimentan alucinaciones, sensación total de paz, sueños o sentir que habían salido fuera de su cuerpo (experiencias extracorporales).
¿Qué ocurre en el cerebro en estos momentos tan críticos? En la actualidad, el conocimiento sobre la actividad cerebral durante las ECM es muy limitado por la gran dificultad de estudiar este fenómeno en vivo y en directo. Sin embargo, un estudio clínico está en marcha desde 2014 para dar respuestas sobre las ECM: el estudio AWARE II (cuya traducción de las siglas en inglés es «CONSCIENTE»). Esta investigación observacional, en el que participan 25 hospitales de Estados Unidos y Reino Unido, indaga especialmente en cómo la forma en la que se hace la RCP tras un paro cardíaco influye en la consciencia y en el funcionamiento neurológico, funcional y cognitivo de la persona.
Los responsables del estudio plantean que «Es posible que los pacientes que son capaces de relatar estas experiencias puedan tener un mejor pronóstico en cuanto a daño cerebral reducido, mejor habilidad funcional y mejor adaptación psicológica al evento. Creemos que estos pacientes podrían tener mejor flujo sanguíneo al cerebro durante el paro cardíaco, lo que llevaría a consciencia y actividad de la mente».
Al borde la muerte
En el estudio participaron 567 pacientes que fueron hospitalizados entre mayo de 2017 y marzo de 2022. Al sufrir una parada cardíaca, los sanitarios les aplicaron una maniobra de reanimación estandarizada, al mismo tiempo que se registraba la actividad cerebral mediante electroencefalograma y se medía el grado de oxigenación cerebral mediante un dispositivo portátil. También se colocó un tablet sobre los pacientes que mostraba diversas imágenes durante el proceso de reanimación (para comprobar si los recuerdos que relatan los pacientes son, efectivamente, reales). Posteriormente, los supervivientes a la parada, que dieron su consentimiento, participaron en entrevistas (grabadas) extensas sobre sus experiencias.
Los resultados de este estudio, liderado por investigadores del hospital NYU Langone Health (en Nueva York), aún no se han publicado en una revista científica, pero sí anunciaron datos clave de sus últimos hallazgos de forma preliminar en las recientes Sesiones Científicas de la Asociación Americana del Corazón el pasado 6 de noviembre en Chicago.
Los científicos descubrieron que el cerebro de los pacientes en parada cardíaca experimenta picos de actividad, incluyendo diferentes tipos de ondas cerebrales (como alfa, beta, delta, teta y gamma) durante un tiempo máximo de una hora, hasta que se realizó la RCP. Algunos de estos picos de actividad también se dan, de forma normal, en las personas conscientes que realizan procesos cognitivos superiores como pensar y recordar. Los autores plantean que este registro de la actividad cerebral podría ser la prueba objetiva de las experiencias cercanas a la muerte.
Sam Parnia, director de investigación de Cuidados Intensivos y Reanimación de la Universidad Estatal de Nueva York y líder del estudio, explica a los medios que: «Estas experiencias lúcidas no pueden considerarse un truco de un cerebro enfermo o moribundo, sino una experiencia humana única que surge al borde de la muerte». El médico defiende la hipótesis de que en estos instantes críticos para la vida se produce una desinhibición del cerebro que lleva a experimentar recuerdos, percepciones y procesos mentales sin los límites que están presentes normalmente estando conscientes.
En un futuro próximo podremos conocer todos los detalles del estudio tras su publicación en una revista. Dado que es la primera gran investigación sistemática que se centra en el fenómeno de las ECM, con pruebas objetivas, es de esperar que arroje datos muy valiosos.
Para saber más:
Sobre la autora: Esther Samper (Shora) es médica, doctora en Ingeniería Tisular Cardiovascular y divulgadora científica
Gracias, me interesa. Me lo leo con calma.
ResponderEliminarNo olvides los enlaces contenidos.
EliminarLa mort és purament, un canvi més.
ResponderEliminarLa meva opinió es que no es un canvi sino una disolució absoluta; un final irreversible. La mort és una tema no debatible, només opinable. Res més, perquè cadascú té una opinió que encara que gairebé mai és basada en fets, és la seva. En definitiva, no sabem res.
EliminarPerò el que és claríssim és que els que han viscut una ECM, no han mort, per molta literatura que es vulgui estendre sobre això.
Naturalmente que los que han sufrido una ECM no han muerto, por eso se puede constatar su actividad cerebral, es el paso previo, pero al contrario de lo que tu opinas, yo creo que eso corrobora que algo mucho más complejo que un simple apagón, es lo que nos sucede al morir... muere el cuerpo, dejan de funcionar los órganos... las ECM solo llegan y llegarán hasta ahí...
ResponderEliminarMuy interesante el art.
Un abrazo muy fuerte!
Máximo respeto por todas las opiniones, por muy especulativas que me parezcan o que sean fruto de creencias. Faltaría más.
EliminarPero, por cierto: ¿Has visto que has sido investida en la "Orden del Temple Bloguero"? (jejeje)
(Mira en la barra laetral, blogs amigos)
No, si yo no tengo creencias al respecto, la verdad es que pienso que debe haber algo más después pura y simplemente porque tanto esfuerzo para que todo desaparezca en un suspiro me parece extraño, pero vete a saber !
ResponderEliminar...Alaaaa! qué ilusión!!! con la envidia que me daba verles ahí a todos con sus ventanitas ... ya tengo casa en tu casa!! graaaciaassS! jaja
Eres un sol!!! <--------------- ASÍ de graande -------------------------------------------------> ; )
MmuaksS!
; )
Ahora, ya sabes... queremos ver cambiar las ventanitas a menudo
EliminarY por cierto, al hilo de la investidura de la orden del Temple ¿ a que no sabías que en Ponferrada ( donde nací) existe el castillo mejor conservado de España de la orden del Temple? así que me has hecho feliz por partida doble... ya solo falta que me nombres caballera jajaja
ResponderEliminarDe niño, algunos veranos cogíamos el 600 y padre, madre y los dos hijos menores, nos íbamos a Galicia, la tierra de mis padres (un palo de viaje desde Girona). Cuando llegábamos a Ponferrada, ya sabía que faltaba poco para llegar. Aunque en los tiempos de Franco, las carreteras del acceso a Galicia, eran interminables hasta que no las modernizaron.
Eliminar