Eugene Smith. Retrato de su ayudante Ishikawa Takeshi
Cuando empecé mi actividad profesional como fotógrafo, era muy consciente de que tenía mucho que aprender. Y eso, se traducía en un afán por saber, en un tiempo en que los estudios oficiales para esa profesión eran prácticamente inexistentes y por supuesto, los que había me resultaban inasequibles. Lo que por aquel entonces sabía, era el fruto de revistas especializadas, algún libro, y sobre todo muchas horas de eso tan conocido del "ensayo y error" y vuelta a empezar.
Posiblemente fuera esa la causa de tener una obsesión enfermiza por conocer los fotógrafos de reconocimiento internacional y saber de ellos era, para mi, tan importante como las técnicas de laboratorio, la iluminación y los modos de toma de imagen.
Creo recordar que ya por aquel entonces (1978) conocí la obra y supe de William Eugene Smith. Y era un fotógrafo del cual solíamos conversar con frecuencia mi buen amigo Luis (otro apasionado de la fotografía que lamentablemente ya falleció).
Recuerdo muy especialmente las largas discusiones sobre la imagen del Baño de Tomoko, de la serie "Minamata"
Discutíamos las fotografías en general y en ésta, sobre el hecho de que en nuestros prejuicios, fruto de opiniones populares poco fundamentadas, nos parecía mal (la ignorancia es muy atrevida) que fuera una imagen muy alejada de lo que se llama "instantánea". Es decir era una imagen en la que el autor, su compañera Ayleen y su ayudante el fotógrafo japonés Ishikawa Takeshi, habían planificado y preparado. Desde la escena, hasta la luz y los protagonistas de la foto que posan, no hay nada confiando a la improvisación y la espontaneidad.
La fotografía se tomó en el humilde hogar de la niña afectada Tomoko, mientras su madre Ryoko la baña. Tomoko nació deforme por la cantidad de mercurio que asimiló en su estado fetal. Aunque no estoy muy seguro, creo que en la foto tenía ocho o nueve años y vivió toda su vida (hasta los 21) con intensos dolores y una total inmovilidad.
Fueron esas discusiones con el añorado amigo Luis, los que incluso motivaron viajes a Barcelona y a Perpignan en busca de revistas que sabíamos hablaban de Smith y que no podíamos encontrar en nuestra ciudad. Sabíamos que anteriormente había sido reportero de guerra y entendimos que en ese proceder, abandonando la instantaneidad del reportero había mucho "oficio" y todo un acierto en la preparación de la foto
La fotografía se tomó en el humilde hogar de la niña afectada Tomoko, mientras su madre Ryoko la baña. Tomoko nació deforme por la cantidad de mercurio que asimiló en su estado fetal. Aunque no estoy muy seguro, creo que en la foto tenía ocho o nueve años y vivió toda su vida (hasta los 21) con intensos dolores y una total inmovilidad.
Fueron esas discusiones con el añorado amigo Luis, los que incluso motivaron viajes a Barcelona y a Perpignan en busca de revistas que sabíamos hablaban de Smith y que no podíamos encontrar en nuestra ciudad. Sabíamos que anteriormente había sido reportero de guerra y entendimos que en ese proceder, abandonando la instantaneidad del reportero había mucho "oficio" y todo un acierto en la preparación de la foto
La perdición de Eugene Smith era el alcohol que no logró superar ni con el amor de Ayleen con la que se casó. Finalmente la bebida propició su muerte por accidente vascular cerebral.
Su sensibilidad era muy especial y su facilidad por perfeccionar lo que veía por el visor de su cámara, la forma en que ordenaba los elementos dentro del rectángulo era sobresaliente.
Siempre me impresionó su declaración de como sentía la fotografía que plasmó en la pared de su cuarto oscuro para que la tuvieran bien presente Ayleen y su ayudante.
Mi traducción no es la de un buen conocedor del inglés, pero creo que no estará muy lejos de lo correcto. Dice:
Mis fotografías, muy suavemente dicen..
Mira, tú mira esto y escucha…
Mira, tú mira esto y piensa…
Mira, tú mira esto y reacciona…
Y lo haces.
No porque te haya obligado a ello,
sino porque has reaccionado.
Mis fotografías, te urgen,
y te hacen, suavemente, pensar y sentir.
Esta es mi esperanza para ellas.
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Fotografía
Una historia fascinant, la redenció profesional a causa de la desgracia dels de sempre.
La lectura de esta entrada da mucho que pensar, que comentar. Por un lado todas las vivencias que tendrás interesantes como esta, planificación o no en la fotografía, una niña afectada por el mercurio, cómo el alcohol acaba con una vida, esas letras en la pared... Un texto muy intenso.
SAludos.
En mi cuarto oscuro también había una pared. Era negra. Pintada con pintura de pizarra.
Sobre las ampliadoras, bien alto, yo también tenía mi frase. Un aforismo para mi. Decía:
No se trata de lo que se ve; se trata de lo que quieres ver. Se trata de como lo sientes y esa imagen en tu mente es el fruto de tus pasiones, sueños, filias y fobias, de los libros que has leído, la música que has escuchado y las personas a las que has querido. Recuérdalo.
Sigue siendo mi máxima a la hora de "hacer" fotos.
Qué bien y justo que traigas a Smith, para mí uno de los más grandes. En cierta ocasión vi en Madrid una exposición con obra suya, donde me impactaron por motivos diferentes los temas de su estancia en España, en la España secular y atrasada, y lo de la industria aquella de Japón que causó tanta enfermedad, muerte y agravio a la población. Gracias por honrar su memoria (honrar es dar a conocer a alguien que ha merecido la pena)
En mis primeros años como fotógrafo, sentía una admiración casi devocional por Smith. Y sigue encendida, pero claro, a estas alturas está muy compartida con muchos otros autores.
Haces reflexionar sobre el concepto que personalmente siempre he tenido sobre la fotografía, eso de la instantánea para captar un momento , un hecho, unos personajes, en vivo y en directo. hay otra de construcción, de preparación, de estudio, que no siempre he valorado como se merece. Co aquello de pensar que ya había otras artes para eso. No sé.
Saludos.
En la fotografía hay espacio más que suficiente para las dos praxis (instantánea o no) y desde luego no se trata de valorar una mas que la otra. A medida que se va obteniendo una cultura fotográfica, también se aprecia el valor que subyace en cualquier forma de obtener imágenes. Yo te invitaría a que reflexionaras sobre si es correcto pensar en que para una determinada forma, ya hay otras artes. La fotografía de estudio, tiene -me atrevo a decir- mucho mas peso que la de reportaje en toda la historia de la fotografia. El retrato, los bodegones (artísticos o publicitarios), la fotografia técnica, médica, la astrofotografía... etc.etc.
Es que los campos son muy diversos y extensos.
Una foto que dignifica al hombre como tal.